Acelere poco a poco cuando inicie su recorrido, a velocidad moderada. Espere a que la temperatura del motor se estabilice para exigir la plena potencia de su automóvil. Si acelera a fondo al arrancar, puede provocar un desgaste del motor, dañar las bujías o los inyectores y producir depósitos excesivos de carbón. Utilice un aceite de buena calidad para darle protección extra al motor en el arranque, sobre todo a bajas temperaturas. En vehículos de transmisión manual, cambie de velocidad cuando el sistema lo permita. Las velocidades bajas están diseñadas para lograr una rápida aceleración, mientras que la cuarta y la quinta son para ahorrar combustible.
El mantenimiento de su coche disminuye el consumo de combustible en un 10%, además de que tendrá un mejor rendimiento. Revíselo cada seis meses o cada 10 mil kilómetros.
Manténga limpio el filtro de aire y cámbielo periódicamente. Vigile la presión de los neumáticos, así como la alineación y el balanceo. Los viajes cortos, sobre todo cuando el motor está frío, aumentan el consumo de combustible y la contaminación hasta en un 50%.
Saque del coche los objetos pesados que no va a utilizar. Por cada 45 kilogramos extra que lo cargas, el consumo de combustible se incrementa en cerca de un 2%.En la ciudad es preferible usar coches pequeños, ya que son más económicos, fáciles de maniobrar y de estacionar. Cuando viaje en ruta, cierre las ventanas y use la ventilación interior, ya que mantenerlas abiertas aumenta la resistencia del aire sobre el vehículo y hay un mayor consumo de combustible. No abuse del aire acondicionado, así como la calefacción y el desempañador de cristales.
No llene el depósito hasta el tope y verifique que esté bien cerrado para que el combustible no se derrame o evapore.
El mantenimiento de su coche disminuye el consumo de combustible en un 10%, además de que tendrá un mejor rendimiento. Revíselo cada seis meses o cada 10 mil kilómetros.
Manténga limpio el filtro de aire y cámbielo periódicamente. Vigile la presión de los neumáticos, así como la alineación y el balanceo. Los viajes cortos, sobre todo cuando el motor está frío, aumentan el consumo de combustible y la contaminación hasta en un 50%.
Saque del coche los objetos pesados que no va a utilizar. Por cada 45 kilogramos extra que lo cargas, el consumo de combustible se incrementa en cerca de un 2%.En la ciudad es preferible usar coches pequeños, ya que son más económicos, fáciles de maniobrar y de estacionar. Cuando viaje en ruta, cierre las ventanas y use la ventilación interior, ya que mantenerlas abiertas aumenta la resistencia del aire sobre el vehículo y hay un mayor consumo de combustible. No abuse del aire acondicionado, así como la calefacción y el desempañador de cristales.
No llene el depósito hasta el tope y verifique que esté bien cerrado para que el combustible no se derrame o evapore.